Vistas de página la semana pasada

lunes, 14 de septiembre de 2015

CRÍTICA: MISIÓN IMPOSIBLE 5


Tom Cruise ya se sabe la fórmula. Después de cuatro entregas y de cuatro directores diferentes, el productor de la franquicia sabe lo que es su saga sobre Misión imposible y lo que la gente espera de ella. Y se lo da. En esta ocasión, quien firma el libreto y la dirección es Christopher McQuarrie. El colaborador habitual de Bryan Singer, que firmó el libreto de Sospechosos habituales o Valkiria, entre otros, saltó a la dirección con Tom Cruise en Jack Reacher, adaptación de un noir con cierto aroma de los 70.  Tanto convenció a Cruise que le encargó otra entrega de la niña bonita de su franquicia. Y aquí estamos.

Considero MCQuarrie un buen guionista, aunque haya tenido algún traspiés y este Misión Imposible V sin duda está para mí entre sus buenos trabajos. En materia de dirección, consigue hacer espectacular -junto a los directores de segunda unidad, claro)- el conjunto. Y es la entrega más coral de la franquicia, aunque quede claro que aquí Tom sigue siendo el capi. Una película de Misión Imposible muy divertida y muy bien “hecha” pero….que es probable que se “autodestruya” al  poco de salir de la sala.

Dicho de otro modo, si en algo se había caracterizado hasta ahora la saga es que cada cinta tenía cierto toque de “autor” que la diferenciaba de las demás sin dejar de ser el pasatiempo que es. Incluso la aún más floja de todas, esa Misión Imposible de Woo donde en Sevilla “quemaban” los santos y Cruise se convertía en semidiós…tenia huella de su autor John Woo en la estilización de su imagen. Eso se ha perdido. Y es que es probable que acaben confundiendo esta entrega con la de Brad Bird, cuyo argumento era más esquemático pero funcionaba mejor su tratamiento de set pieces.

Pero no. Misión Imposible: Nación Secreta no es ni de lejos una mala película, ni siquiera la peor de la saga. Es divertida, entretenida, emocionante, pero planea una sensación de dejà-vú global que no la beneficia, a pesar de todo el empeño que le han puesto los implicados: Cruise en escenas de riesgo sin doble, Pegg en su versión más divertida, Renner en plan Renner -indiferenciable con su Ojo de Halcón, pero lleva la carga del film cuando no está Cruise con el menos es más- y un Ving Rhames que vuelve a participar en la misión, manteniéndose en segundo plano, pero aportando su veteranía de Soul Man. Sí, esta vez Tom ha encontrado un equipo titular junto con la incorporación de Rebeca Fergusson, especie de femme fatale que, aunque cumple sobre todo en la acción, es la pieza que particularmente menos me convence del equipo.

En definitiva, Misión Imposible: Nación Secreta es el folletín de espías que esperas con más gags y guiños que nunca, adaptado a los cánones del cine espectáculo actual;, como el humor geek y la idea de un grupo de súper-individuos. Otro buen capítulo pero que para mí…le falta algo de "verdadero" factor sorpresa.

NOTA: 7

No hay comentarios:

Publicar un comentario